LEÓN, GTO.- Para que una victoria se disfrute, la neta hay que hacerla emocionante, sufrida, hay que restarle un poco de contundencia para demostrar que costó trabajo, que cada gota de sudor valió la pena. León captó la clave de esta onda y se impuso este sábado ante los Santos Laguna de Torreón par marcador de 2-1 con dos tantos en los últimos siete minutos de partido.
Y es que con un futbol ofensivo, pero una entrega casi sobrenatural de todos los integrantes del equipo de Juan Antonio Pizzi, la Fiera sumó tres puntos más luego de imponerse a los Guerreros en el último suspiro del encuentro.
El juego inició con los Verdes buscando chambitas por todo el terreno de juego. Hubo llegadas por derecha, por izquierda, por el centro, por todos lados pues. Sin embargo, con los visitantes agazapados en su mitad de terreno comenzaron los problemas.
La filosofía de los pupilos de Pedro Caixinha era clara: Había que esperar un error de los Verdes para dar un golpe de poder.
Con apenas 22 minutos de tiempo corrido, Carlos Izquierdos puso en ventaja a los Santos por la mínima tras conseguir el gol en una jugada donde justamente hubo un par de errores defensivos por los Esmeraldas al momento de buscar el rechace.
A pesar de que se buscaba la forma de revertir el resultado, nada llegaba para los Verdes que debieron conformarse con irse al descanso con el marcador en contra a pesar de que ciertamente dominaban en el enfrentamiento.
Para el complemento hubo cambios interesantes. Luego de unos cuantos minutos de duda y de estrategias, Luis Montes entró a la cancha para colaborar con un poco de su estilo de juego que buscando servirle al equipo. Sin embargo la meta de Federico Marchesín no se iba abrir tan fácil.
La Fiera poco a poco se ganaba los espacios, presionaba y buscaba el gol del empate en todo momento. Sobre todo luego de que se salvaran de recibir el segundo en por lo menos dos ocasiones. Hasta el minuto 83 de partido, Jonathan Bottinelli remató en el cobro de un tiro de esquina para enviar la pelota hasta el fondo de las redes y empatar el encuentro. El zaguero argentino lo gritó como nunca.
Con todo el aliento y el empuje de su afición, León se concentró en buscar los tres puntos. El empate parecía suficiente sólo para poder dar la cara ante su gente pero no para ganarse el respeto de aquellos detractores que todavía no terminaban por “aprobar” los cambios y estrategias del nuevo entrenador.
Con el tiempo encima pero las ganas bien presentes, El “Gallo” Vázquez disparó desde fuera del área como si no hubiera un mañana y marcó un poema de gol que más allá de poner locos a los poco más de 20 mil aficionados que abarrotaron el Estadio, le regaló tres puntos más a los Verdes en su lucha por figurar entre las mejores posiciones.
La verdad, siendo sinceros, la Fiera tuvo una noche buena por el resultado y algunas pinceladas de buen futbol, sin embargo aún quedan algunos detalles importantes por trabajar. El caso de la incorporación total de Luis Montes, según explicó el propio Pizzi, tomará tiempo y se realizará, todavía, de forma paulatina.