CDMX.- Frente a los puertos de Tuxpan y Coatzacoalcos, Veracruz, hay al menos 24 buquestanque con combustible que no han podido entrar al puerto para descargar el producto.

Lo anterior debido a que las terminales de almacenamiento se encuentran saturadas por la estrategia que está siguiendo el gobierno federal contra el robo de combustibles.

Según Mitchel Dehesa, director de Negocios Downstream Oil & Gas en SGS México, esta situación provocará una carga económica para Pemex, ya que mantener a los tanqueros en esta situación genera penalizaciones que van de los 25 mil a 30 mil dólares diarios por barco.

Tan sólo en Tuxpan estaban fondeados, hasta el jueves pasado, diez barcos tanto de Pemex, como contratados para hacer el flete, mientras que en Coatzacoalcos se contabilizaban 14 con destino a Pajaritos.

De tal forma que por los 24 buques tanque tendría que pagar más entre 600 mil y 720 mil dólares diarios.

Esta situación también se registra en Coatzacoalcos que da entrada a la terminal de Pajaritos, donde hay un número muy considerable de barcos fondeados porque los ductos que conectan a Minatitlán con otros puntos geográficos son revisados.

De acuerdo con el personal de la terminal de Pajaritos, las maniobras de descarga de combustibles son lentas debido a las acciones emprendidas por la Presidencia de la República además del lento proceso para descargarlos. En Tuxpan son ocho navíos que están “formados”.

Cabe destacar que ayer, durante la conferencia matutina, el presidente Andrés Manuel López Obrador fue cuestionado sobre cuál es el estatus de dichos buques tanque en Coatzacoalcos, y respondió que “lo de los buques tanque, no precisamente en Coatzacoalcos, en Tuxpan, donde se está importando gasolina, hay buques tanque todos los días, imagínense”.