Yo conocí a Robert Wise por “West Side Story” (1961) y “The Sound of Music” (1963), “Amor sin Barreras” y “La Novicia Rebelde” (depende a quién le preguntes); Son musicales fantásticos y de los cuales están entre mis favoritos, pero, cuál sería mi sorpresa al saber que Wise dirigió películas de terror, haciendo de su carrera una muy polifacética.Un experto a la hora de dirigir.

Una parte morbosa de mi ser pensaba si sus películas de horror tendrían coreografías movedizas y estereotipos incómodos…desgraciadamente, no fue el caso.

The Haunting comienza con una secuencia donde se nos narra la historia de los anteriores dueños de una tenebrosa mansión, esto con la voz del Dr. John Markway (Richard Johnson). En esta secuencia no escuchamos nada de los protagonistas de la historia, y las transiciones de escena son de imágenes que transmutan a la siguiente, dándole un aire bastante surrealista. En la casa vivía la familia Crain, la cual estuvo rodeada de la tragedia y la soledad. La primera esposa del matrimonio falleció en un accidente de carruaje. El señor Crain se vuelve a casar, y su segunda esposa muere en circunstancias misteriosas en las escaleras. La única hija que tuvo, Abigail Crain, vive en la casa acompañada de su enfermera personal, hasta que muere en su cama por un descuido de esta. Aparentemente por la culpa (o no sabemos qué fue la causa), su enfermera termina ahorcándose en la biblioteca del hogar.

Markway, es  un estudioso de lo paranormal, y que quiere conducir un experimento en la mansión, para comprobar si es que existe un misterio sobrenatural que rodea a los eventos fatídicos del hogar. Logra conseguir el permiso, y realiza una lista de gente que ha tenido experiencias paranormales para lidiar con su caso en particular.

Lo que nos lleva a Eleanor… ¿Quién en este mundo se apellida Trepunk?

Eleanor Lance (Julie Harris) es una mujer que se ha perdido los últimos años de su vida cuidando a su madre enferma; su madre falleció hace 2 meses, y Eleanor vive en casa de sus hermanas. De aspecto gastado, triste, y reprimida, Eleanor no es exactamente la mujer que dirías que es fuerte (un simple niño burlándose de ella la hace llorar). Cuando recibe la invitación del doctor Markway, ella ve la oportunidad de vivir unas vacaciones, una aventura en su triste e insípida vida… como muchos de nosotros hemos querido tener en algún momento de nuestra vida.

Eleanor no recibe el apoyo de sus familiares y decide huir a la mansión sin su consentimiento; al llegar, resulta que es la primera en hacerlo, le muestran su habitación, y por un momento se queda sola….sola en una mansión extraña y desolada; esto es hasta que llega Theodora (Claire Boom), mujer bastante sensual y que se gana la confianza de Eleanor, hasta que llega el Doctor.

Eleanor, Theodora, y Markway, son los únicos que asisten para investigar y demostrar la veracidad del mito de Hill House, acompañados de Luke Sanderson (Russ Tamblyn), el molesto sobrino de la dueña actual de la casa.

La película es más sensible de lo que uno podría pensar, hasta podría parecer una película más cercana a un drama, que a lo que tenemos en mente por terror. Existe un triángulo amoroso entre Eleanor, Theodora, y John: Eleanor está enamorada de John, es un hombre apuesto, listo y amable con ella, y Theodora lo está por Eleanor.

Esto es bastante curioso, para el año en que se estrenó la película, pocas habían tratado personajes homosexuales, y en un sentido serio, Theodora no es un personaje burlón, y nunca dice abiertamente que sea lesbiana, pero sus acciones, y ciertos diálogos la delatan, es entonces que lo que tenemos como drama en la película, resulta bastante bien realizado y vemos el conflicto que tiene Eleanor, pues siente algo por el apuesto doctor, pero siempre a escena, “Theo” la mira con un deseo, y algo recelosa de John. No deriva en la típica historia de amor. De alguna manera, los tres personajes son reprimidos: Eleanor, toda su vida, John, con la falta de aprobación de su esposa, y Theodora, en base a su sexualidad.

Ese juego de miradas delata una tensión sublime.

Comprendemos que “The Haunting” puede referirse a algo más que sólo una casa con puertas que se cierran solas. Y esto no quiere decir que no sea una auténtica película de terror, al contrario, es el principal atractivo, después de todo.

Las secuencias de los personajes en la casa, son bastante pesadas en cuanto a imagen refiere; la casa está llena de estatuas, jaulas, puertas, parece un laberinto sacado de una pesadilla, y si a esto le sumamos las sombras que juegan con nuestra paranoia, siempre sentimos que algo está en los cuartos, vemos ojos donde no los hay, y nos queda la incertidumbre si lo que estamos viendo es algo del más allá, o simples sonidos.

La composición de las escenas muestran la escenografía tan tenebrosa, y realza una estética en cuanto la posición de los personajes, estética  que habla mucho en momentos en los que Eleanor piensa y se aleja de este mundo.

Recomiendo ver esta película en la oscuridad de su hogar, la sensación es increíble: hay una barrera que se rompe al momento de hacerlo bajo estas especificaciones, los ruidos que aparecen en la película, se apoderan de nuestra sala o cuarto, y no nos sentimos de pronto seguros… lo que me hace pensar que la película debió haber sido un completo deleite en las salas de cine (Por favor, un reestreno o función en un cineclub)

El único problema que tengo, es con el personaje de Luke. TODO, absolutamente TODO lo que dice es con una finalidad humorística y siempre con un comentario relativo a qué le hará a la casa cuando él sea el dueño absoluto, esto lo hace inútil e incluso las escenas tensas, son rotas en ocasiones por la idiotez de este, pues idiota.

La primera vez que la vi, no me gustaba la voz en off que tiene Eleanor, y ahora que la vuelvo a ver, cambió bastante mi idea en cuanto a este recurso; lo que hace el que podamos escuchar los pensamientos de esta triste mujer, en primera nos hace sentir aún más tristeza por ella, pues estos revelan tanto la culpabilidad que ella siente por la muerte de su madre, o los sentimientos que surgen con sus compañeros, además de indagar en el elemento sobre la psique de este personaje. Vemos más que su descenso a la locura, su libertad, es una mujer con problemas y que poco a poco delira más y más….perfecta la actuación de Julie Harris, actriz que conocí por “Al este del Edén” (Elia Kazan, 1955). Impregna a su personaje de una tristeza que he visto en pocas películas, tristeza que uno puede ver hasta en su aspecto visual, no era una mujer fea, y aquí aparece como una mujer que ha perdido los años más importantes de su vida. Fue su mejor actuación.

¿Es real, o se trata de cosas que imagina Eleanor? es una película que es muy interesante de debatir y analizar, pues queda mucho al criterio de la audiencia, el recalcar si la locura hace que imaginemos lo peor, o hay fuerzas en este mundo que no podemos comprender… ¿Qué opinan ustedes?