CIUDAD DE MÉXICO.- Durante el segundo debate presidencial, la candidata de oposición, Xóchitl Gálvez, fue más combativa que en el encuentro previo, pero no lo suficiente como para dejar fuera de combate a su rival.
Gálvez llamó a Sheinbaum “candidata de las mentiras” y “narcocandidata”, también la acusó de corrupta y evasora fiscal.
Por su parte, la candidata de morena, Claudia Sheinbaum, siguió en su papel de estudiante disciplinada y ahora sí defendió las acciones del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Claudia llamó a Xóchitl “corrupta” y la acusó de obtener contratos cuando era funcionaria federal en el Gobierno de Vicente Fox.
Jorge Álvarez Máynez, de Movimiento Ciudadano, continúa siendo irrelevante y sin peso específico para generar un cambio en la contienda.
En cuanto a la producción del debate, el INE mejoró en cuanto al manejo de tiempos, no hubo problemas con los cronómetros, pero sí con la iluminación. La falta de movilidad de las candidatas y el candidato también hizo padecer a los mexicanos de un debate acartonado.