LEÓN, GTO.- Tras 27 años de militancia, Yulma Rocha renunció al PRI. Entre sus principales motivos se encuentran la violencia política de género en su contra y la inmovilización del partido, “esperando por una alianza con el PAN, solo para sobrevivir políticamente”.
“Hoy renuncio al PRI, en los últimos años ingenuamente intenté junto a otros compañeros generar un proyecto de partido incluyente que estuviera presente en cada rincón del estado a través de su militancia. Con una agenda social que atendiera los principales problemas de la gente. Que fuera cercano con la ciudadanía y una verdadera oposición, para ser una verdadera oposición ciudadana. Sin embargo, no fue posible lograrlo”, explicó la legisladora local en un video publicado en sus redes sociales.
Luego describió las acciones que sobre la militancia de Guanajuato ha tomado la dirigencia nacional, encabezada por Alejandro “Alito” Moreno.
“Desde la dirigencia nacional se nos vio como súbditos y no como personas pensantes, querían sumisión y no capacidad.
Y entonces comenzó una cadena de errores que incluyeron violaciones a la ley para hacer a un lado a la militancia guanajuatense, extinguiendo la vida partidista, pues hoy tenemos comités abandonados, una dirigencia que no sabe ni dónde quedan los municipios, que no conoce a los militantes, sin rumbo ni proyecto, sin interés para ser puente con la ciudadanía, ni mucho menos opción de gobierno”, explicó.
Rocha Aguilar ahondó sobre la situación de la dirigencia estatal, a cargo de los también legisladores locales, Alejandro Arias y Ruth Tiscareño.
“Inmovilizaron al partido esperando por una alianza con el PAN, solo para sobrevivir políticamente. Se olvidaron que somos oposición y se sometieron al gobierno sin recato alguno”, sostuvo.
Aclaró que no se va del PRI porque se le haya negado un cargo o una candidatura.
“Puede que sea impopular mi decisión de renunciar, pues en la vida política nos acostumbraron a la disciplina y a la lealtad a los colores de un partido. Pero la libertad es un valor irrenunciable y hoy en el PRI esa libertad se ha convertido en un problema, pues las posiciones únicas, la sumisión y la mediocridad, se convirtieron en la condición para ser aceptado y caer bien. Y esto es incompatible con mi naturaleza y mi concepción de política”, señaló.
Dijo que se trataba de un momento emocionalmente difícil para ella porque considera que el PRI fue muy generosa con ella, porque fue una buena militante.
“Me voy muy agradecida con el PRI que fue, pero sabiendo que para el PRI de hoy solamente soy una más que se va. Desafortunadamente no soy la única, ni seré la última”, concluyó.