LEON
Punto In

¿QUIÉN ME HA ROBADO EL MES DE ABRIL?

En el páramo que suele ser el rock en español, pocos, muy pocos representantes pueden llegar a la categoría de leyenda. Joaquín Sabina es uno de ellos y razones hay de sobra: una inteligencia y sensibilidad fuera de lo convencional para retratar a través de sus historias, las varias caras de la derrota masculina en lo que tiene que ver con sus conflictos sentimentales; pero la lírica del autor hispano es más que eso. Por su monumental obra se perciben registros de varios géneros musicales y temas universales de un cinismo e ironía pasados por el filtro del humor.

Dicen que viene a León el 8 de Noviembre, entonces he aquí diez ejemplos representativos que apenas y rozan su legado al rock hispano.

Pisa el acelerador. Tiempos en que al rock se le permitía ciertos esbozos contraculturales y de aliento anarquista. Una presentación para la televisión que ya anunciaba esa presencia medio bufonesca donde nada se tomaba en serio.

El rocanrol de los idiotas. Una de las más sobresalientes elegías en torno del amor, del azar, del encuentro sobre dos seres solitarios que se niegan a la entrega total.

¿Quién me ha robado el mes de abril? Un himno a la melancolía, al desamor, al desarraigo, quizá inspirada en la propia vida farandulera del autor. En su construcción lírica, evoca las cintas de comedia juvenil con sus trazos de nostalgia. De sus rolas más conocidas.

Conductores Suicidas. Sabina y compinches que le acompañan son el raro caso de las agrupaciones que tocan mucho mejor en vivo que doblados por la postproducción de la industria del videoclip. La muestra la pone este video que además deja ver el socarrón sentido del humor de la alineación.

Por el boulevard de los sueños rotos. Poesía a través de imagen y sonido, una dulce evocación a Chabela Vargas en un estilo que recuerda las películas clásicas del cine mexicano, a la plástica de Gabriel Figueroa. Para no ser mexicano, hay mucho aprecio por sus temáticas y raíces estéticas.

Medias negras. Esta es quizá la más desesperanzada de sus elegías; un devaneo mortal para el corazón, esas heridas que no cicatrizan a pesar del tiempo. Otra muestra de la maestría acerca de la condición derrotista de sus personajes epónimos, en una de esas, cronista de sus propias experiencias.

https://www.youtube.com/watch?v=IPT9q5_4js0

Una de romanos. La melancolía de esta canción me afecta de manera particular, ya que fui (soy) un enamorado de estas películas conocidas como Peplum, hoy tan defenestradas por las generaciones jóvenes. La letra de Sabina supo captar los incidentes que solían ocurrir en esas inmensas salas de cine con la oscuridad de cómplice.

Así yo estoy sin ti. Quizá, visualmente el video no esté muy logrado. Pero la letra y la música habla volúmenes acerca del truene y la decepción amorosa… “quemado como el cielo de Chernobyl” metáforas de un ingenio por encima de muchos poetas incluso.

Pobre Cristina. Una cruda radiografía a la que ha sido la más famosa socialité de la historia a quien el aura de tragedia siempre acompañó. Bien dicen que el dinero no compra la felicidad y Sabina supo imprimir su socarrona visión con algunos dejos de humor negro. El video es de una presentación televisiva hace ya algunos añitos.

Nacidos para perder. Otra cruda elegía acerca del derrotismo lapidario que sólo un trovador a su altura supo imprimir en la industria musical. El estilo elegante y refinado del sonido nos hace pasable estos escupitajos a la cara que nos asestaba continuamente.

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