PUEBLA, Pue.- La vida de cualquier persona está llena de sorpresas, la de un deportista, la de un ciclista en específico, se basa en dos hechos antagónicos: las proezas y las tragedias. Ayer, sin esperarlo, el pedalista leonés Ignacio Prado vivió un capítulo negativo en su carrera cuando una pinchadura a tres vueltas de concluir el gran fondo de la Olimpiada Nacional, le arrancó de tajo las alas para buscar el oro en una competencia en la que ya pintaba como principal candidato a la victoria.

Y es que neta, el guanajuatense estaba pedaleando duro, machín, mantuvo un ritmo constante, simple y sencillamente fue el papi de la carrera, él dijo cómo, cuando y en qué momento se iba a atacar, a contener o a perseguir.

Prado impuso las condiciones en la carrera.

Tras los primeros 42 kilómetros de recorrido, Nacho apretó el paso y dejó a cinco de los nueve pedalistas que buscaban la fuga para solamente quedarse con José Alfredo Santoyo, de Jalisco, Gerardo Medina, de Chihuahua y Eduardo Cortés, de Tlaxcala.

Consciente de que de él dependía poder pelear por el oro, el hijo pródigo de las dos ruedas comenzó pedalear con mucho ímpetu pese a que detrás de ellos, a un minuto con reducciones constantes, se le acercaba el vigente campeón nacional de ciclismo Luis Lemus, corredor del Jelly Belly de los Estados Unidos.

Luis Lemus, Campeón Nacional, persiguió al grupo de Prado durante toda la carrera.

La tragedia de Prado

Todo parecía pan comido para el guanajuatense, no había ataques y cuando se daban “jalones” en el sentido más técnico que se pueda entender, Prado los contenía con facilidad. Con paso firme el ciclista de León se iba acercando a la posibilidad de sumar su segundo oro en la presente olimpiada, sin embargo el destino le tenía preparada una mala pasada.

A solamente tres vueltas al circuito del Fuerte de Loreto para la conclusión de la competencia, “Radio Tour”, hizo el anuncio tétrico, Nacho había sufrido una pinchadura… una pin… pinchadura. Pese a la rápida acción de los mecánicos y asistentes, Prado tomó su bicicleta y comenzó a perseguir a sus tres compañeros de fuga, sin embargo, sacando su lado gandallín, Gerardo Medina aprovechó el percance de Ignacio para lanzar su ataque que, para no variar, fructificaría y sería definitivo.

Nacho, que ya había visto más cercana la posibilidad de ganar el oro, ahora veía desvanecerse las posibilidades; A pesar de la entrega realmente densa que le metió el guanajuatense, no hubo tiempo ni fuerza para más, Prado se entregó al grupo de Lemus y terminó por cruzar la meta en la 9a posición.

Pese a no figurar en las medallas de la ruta, el leonés se colgó el bronce en la combatividad, por debajo de José Alfredo Santoyo y Gerardo Medina.

Medina, de Chihuahua, se llevó el oro en la competencia.

Resultados Ruta Individual 

1o Gerardo Medina/Chihuahua

2o Eduardo Cortés/Tlaxcala

3o Julio César Benitez

9o Ignacio Prado/Guanajuato