Por: Alejandra García

LEÓN, GTO.- Les tengo una noticia… Si creían que todo es risa y festejo durante el día del niño, lo cierto es que no. Hay indicadores que opacan lamentablemente este día y, sin ánimos de echarle a perder la fiesta a los diablillos, aquí van algunos datos que le queman la conciencia al mexicano adulto. Claro, los que tienen.

Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) se supone que los dos millones de niños, niñas y adolescentes que nos rodean deben ir a la escuela, pero no es así. El 4% de los que tienen entre 6 y 14 años no lo hacen.

Además, muchos de los niños enferman gravemente. Por ejemplo, en el 2013 el 61.1% del total de los egresados en hospitales por enfermedades infecciosas intestinales fueron niños y adolescentes.

Algunos no se recuperan, pero otros lamentablemente mueren. El resto de las muertes ocurren en el momento en el que nacen, o a los pocos días de haber llegado al mundo. Aun así, la tasa de mortalidad en niños y niñas menores de 5 años bajó entre 1990 y 2014, de 44.1 a 13.7 muertes por cada mil que nacen vivos.

No sólo hay muerte y enfermedad entre los chavitos que nos rodean, sino también discapacidades (2.4%) y limitaciones (4.4%).

Y no podemos olvidar los derechos de los niños que, a pesar de ser muy famosos, no siempre son respetados. Muchos de los niños que tienen entre 5 y 17 años deben trabajar, dejando a un lado su infancia para formar parte de los 3 millones de niños que son explotados laboralmente, y/o del 64% que no recibe salario.

Algunos padres ni siquiera se toman la molestia de registrar a sus hijos cuando nacen (3.3%), o se esperan hasta que el bebé cumple un año para hacerlo (2.2%), y eso que es un derecho que tienen todos los niños para adquirir una identidad, nombre, nacionalidad y derechos humanos. Sin embargo, el resto son registrados antes de los seis meses (92%), o con más de seis meses pero menos de un año (5.1%).