GUANAJUATO, GTO.- El viernes 1 de abril fue vinculado a proceso el último de los 6 hombres que hasta el momento se conoce participaron en el ataque a la periodista Karla Silva el 4 de septiembre de 2014, mismo que estuvo prófugo 1 año y casi siete meses: Nicasio Aguirre Guerrero “El Nikki“, ex-director de policía del gobierno priista del municipio de Silao (2012-2015).

Fue vinculado como instigador, misma acusación contra el ex alcalde Enrique Benjamín Solís Arzola, por los delitos de lesiones calificadas, robo calificado y amenazas.

Nicasio Aguirre declaró ante el juez de control que fue el ex presidente municipal quien durante más de dos meses lo estuvo presionando para que le diera un susto a la reportera Karla Silva, porque le estaba “echando mucha tierra con sus notas. “

El cierre de investigación será el 14 de mayo del 2016, lo que significaría someterlo a un juicio en conjunto con el propio ex alcalde priista Enrique Benjamín Solís Arzola, con quien ya comparte la prisión preventiva en el CERESO de Irapuato.

Es muy importante resaltar que en esta ocasión, tanto la fiscalía como el juez hicieron un análisis de fondo en esta audiencia sobre la violencia de género ejercida contra la periodista por su condición de mujer y el derecho a la libertad de expresión que en el caso concreto, se vio violentado, así como la gravedad de que un director de seguridad pública utilizara su poder y los recursos públicos para agredir a una periodista cuando su responsabilidad era garantizar la seguridad de las y los ciudadanos. E incluso profundizaron en la gravedad de no prevenir la agresión, ya que como él mismo declaró, tuvo conocimiento de la intención del ex alcalde para violentar a la periodista, y no hizo nada para prevenir dicho ataque, aún y cuando el mismo dijo “yo no quería hacer eso“.

Este caso debe marcar un antes y un después en nuestro sistema de procuración y administración de justicia en el estado de Guanajuato y en el país, porque debemos celebrar que este viso de justicia -al ver a un ex alcalde y un ex director de seguridad pública, dos funcionarios del más alto nivel del poder público- estén frente a un juez. Ello también nos permite señalar que la justicia para periodistas que sufren agresiones en razón de su labor debe ser la regla y no la excepción. En consecuencia, nos permite pensar que se alcanzará el más alto nivel de justicia para Karla y para las y los periodistas de Guanajuato, quienes han sido los principales actores en exigir a las autoridades que no dejen impune este caso y han acompañado de manera extraordinaria en este proceso a su colega Karla Silva.

Recordemos que “aún cuando la política los hacía desiguales de hecho, la igualdad ante la ley los volvió iguales“.

El centro Las Libres, la Clínica de Interés Público del CIDE, Article 19, y la propia Karla Silva, celebramos que el aparato de justicia en Guanajuato funcione y actúe, así signifique tener que someter a un juicio también a los políticos que nos han gobernado. Tenemos toda la confianza que este caso alcanzará el más alto estándar de justicia de nuestro país y que ello conlleve el mensaje para los políticos que tienen la tentación de agredir a los periodistas y con ello inhibir la libertad de expresión, censurar, agredir, violentar, y hasta asesinar porque su poder se los permite.