CIUDAD DE MÉXICO.- El titular de la Fiscalía General de la República, Alejandro Gertz Manero, dijo que prácticamente la Fiscalía de Jalisco no realizó una investigación a fondo sobre los hallazgos en el “Rancho Izaguirre” en Teuchitlán, Jalisco, y enumeró 15 graves omisiones que hacen obvia la colusión de las autoridades locales con el Cartel Jalisco Nueva Generación.

Las omisiones fueron detectadas en base a las diligencias que se hicieron en septiembre y octubre del año pasado en ese sitio, por parte de la Fiscalía General del Estado de Jalisco.

1.- No realizaron el rastreo de indicios o huellas de los hechos.

2.- No se cumplió con el debido registro de identificación de todo lo hallado, sobre todo en lo que hace a las prendas de vestir y calzado que quedaron abandonadas en ese sitio.

3.- No se procesaron debidamente los vehículos encontrados, de los cuales tres, ya han sido robados.

4.- No se dio intervención inmediata a la Fiscalía General de la República por los delitos de posesión y utilización de armas de fuego de alto calibre y por delincuencia organizada.

5.- No se realizó la inspección total y exhaustiva del lugar.

6.- No se ordenó la inmediata identificación de las huellas dactilares que ahí se encontraban.

7.- Seis meses después, los servicios periciales del Estado de Jalisco aún no cuentan con un dictamen definitivo en el que se establezca con precisión la identidad y la antigüedad de los restos encontrados.

8.- Tampoco cuenta con lo análisis físicos y químicos que de forma directa vinculen a diversas zanjas con la posibilidad de actividades crematorias.

9.- No se han establecido con toda precisión los vínculos, encubrimientos y coparticipaciones de autoridades locales con los carteles delictivos que operan en esa región, a pesar de que diversas personas secuestradas en dicho inmueble ya lo declararon y en un caso elementos de la Policía de Tala, cercana al lugar, encabezados por su jefe, operaron de esa manera y uno de ellos se encuentra ya detenido.

10.- Declaraciones semejantes se han encopetado en carpetas locales que no fueron integradas a la investigación de este caso, como era obligatorio.

11.- Tampoco se les dio seguimiento cabal a las declaraciones de una de las víctimas, respecto a que las prendas de vestir que ahí se encontraron eran de las personas que los delincuentes habían reclutado y adiestraban en ese sitio y, por ello, dejaban sus ropas para uniformarse y equiparse de conformidad con las características tácticas, de dicho cartel delictivo. Identificaciones ahí encontradas recientemente, corresponden a sicarios de carteles criminales que ya fueron detenidos e otras entidades.

12.- Prácticamente, después de las diligencias ministeriales locales, dicho inmueble quedó en estado de abandono y sin ninguna protección a pesar de que se hallaba asegurado por el Ministerio Público Local.

13.- Tampoco se identificaron de inmediato los antecedentes y la posesión en propiedad del actual inmueble.

14.- No se tomó la declaración inmediata del presidente municipal, del secretario general y de el de seguridad pública del municipio de Teuchitlán, respecto a sus obligaciones de prevención del delito.

15.- No se levantaron las actuaciones testimoniales de vecinos, ni de personas posiblemente vinculadas.

Al ser preguntado por la prensa sobre un posible vínculo de la policía del municipio de Tala con organizaciones criminales, el fiscal dijo que esto “obviamente es evidente, pero por supuesto”.

Sin embargo, después sustentó su señalamiento en que estas serían declaraciones de testigos: “no es que lo diga yo”, abundó.