FIESTA BRAVA SIGUE ENFRENTANDO A LEONESES
LEÓN.- Tal y como se esperaba este 26 de marzo, la fiesta de los toros volvió a convertirse en la manzana de la discordia en nuestra ciudad.
En el anunciado Festival Taurino 2014, defensores de los animales y aficionados al arte de cúchares, se enfrentaron a gritos.
Desde atrás de un enrejado, que dividía la calle Cerrito de Jerez con la elegante y novedosa plaza ALTACIA y a tan solo 10 metros del coso portátil, un grupo de 120 integrantes de la fundación Animare, gritaban a matadores, picadores, monosabios y aficionados consignas como esta:
“Respeten a los niños ” Toros sí, Toreros No”, “Voy a matar y luego a rezar” Y “Matar no da estatus”…
Ahí, molesto, frustrado y en momentos desesperado, Arturo, joven estudiante de la universidad de Guanajuato, intentaba cambiar libros por boletos para entrar a la corrida, pues aseguraba que la mejor manera de impulsar la cultura es leyendo, “no asesinado a un pobre animal”.
Por su parte la “gente bien”, que llegó bien emperifollada, elegante y bien perfumada, entre dientes, “para no quemarse”, y con sonrisas nerviosas, dejaban salir frases como: “pinche bola de nacos, váyanse a barrer su casa” o “aquí les va la roque señal pinche bola de gatos culeros” mientras un elegante, ganadero, levantaba el dedo índice y arriscaba sus otros cuatro dedos de la mano derecha, para saludar a los de enfrente.
La estocada especial, vino afuera del coso, cuando llegó William Yarbrouh, el joven portero de los esmeraldas de León al recibir de “la nacada” -como él la llamó- un señalamiento que sí le caló: “portero asesino” a lo que solo atinó a responder: “ya me enredaron en el desmadre”, mientras le decía a este reportero: “No me chingues, no grabes, no mames”.
Enojados hasta el tope estaban el Torero “Mingo” Sánchez, enemigo acérrimo de la Regidora Beatriz Manrique, quien aceptó crear una mesa de diálogo con sus opositores tras señalar “que se trata de defender las libertades, no de enfrentarnos”.
Por su parte Ismael Rodríguez, el último torero de origen leonés, exigió a las autoridades que en lugar de ver por quitar estas fiesta Brava, “mejor atiendan a los niños pobres como yo, que nunca tuvieron la oportunidad de ir a la escuela, aquí hay empelo y formas de vivir, no se vale que hagan esto, mejor que ayuden de otra forma”.
Mientras tato, a espaldas del matador, casi a escondidillas, el Director del Sistema de Limpia, Norberto Origel, entraba feliz a formar parte de los festejos taurinos de este sábado… sin importar que hayan entrado o no niños al coso “de rompecabezas”.