EXPLOTAN Y QUEMAN A BOTELLO
LEÓN, GTO.- Vecinos del Barrio de Santiago explotaron y prendieron fuego a la alcaldesa de León, Bárbara Botello, durante la tradicional “Quema de Judas”.
Obviamente no fue a Bárbara a la que le hicieron esas barbaridades, sino a una bruja con todo y escoba que fue hecha de cartón, madera, papel y fuegos artificiales, que la representaba.
Se trata de una tradición que por 99 años se ha realizado de manera ininterrumpida ahí, en la línea divisoria entre el Barrio de Santiago y la colonia Obregón, con el objetivo de reconocer a las personas amadas por la banda y, por supuesto, a las odiadas.
En esta ocasión, la alcaldesa Botello encabezó la lista de las personas no gratas pal populoso Barrio de Santiago, incluyendo los policías de la patrulla 331, quienes días antes se llevaron al bote (cárcel) a tres de los organizadores.
Primero quemaron unos monos con dedicatoria pa los vecinos que han muerto en lo que va del año y pa los que se mocharon con una buena lana pa la organización del evento.
Y entre quema y quema… las chelas, las caguamas y el pisto cruzaban de norte a sur y de oriente a poniente por la esquina de las calles Amado Nervo y Hermanos Aldama.
Así es, la fiesta y “las frías” corrían a caudales pa mitigar “la calor” bajo la condescendiente mirada de los elementos de Protección Civil.
Personal que, afortunadamente, sólo tuvo que atender a una doña que recibió un golpe en la cara por un pedazo de yeso que salió disparado de uno de “Los Judas” explotados.
Pero no pasó nada, la tradición siguió más arraigada y tradicional que nunca.
El animador de la fiesta se llevó las orejas y los rabos de la tarde por la implacable carrilla que lanzó en cantidades industriales contra organizadores, vecinos, reporteros y, muy en especial, a compañeras periodistas a quienes les hizo recordar que el oficio es matado, pero delicioso.
También hubo llanto pa los muertos y rechiflas pa los que se pasan de vivos.
Cuando la bruja de Botello fue colocada en la intersección de las calles, las rechiflas tuvieron rienda suelta.
Era el sentir de cientos de ciudadanos hacía su alcaldesa, a quién principalmente le reclaman el aumento al pasaje del transporte público y el descontrol en el servicio de recolección de basura.
“Es una expresión para que pongan más atención en lo que hacen, entonces no se puede hacer otra cosa más que hacerse notar, está mal, pa qué es más que la verdad, está mal. Que ponga más atención en lo que va hacer y que le eche más ganas”, dijo Antonio Ramírez, uno de los organizadores más viejos de “La Quema de Judas” antes de hacer que la bruja diera vueltas en su escoba por el impulso de los cohetones.
La festividad comenzó como a eso de las 12 del día y terminó a las tres de la tarde del soleadamente exquisito domingo 20 de abril.
Será hasta el próximo año cuando “La Quema de Judas” alcance los 100 años y las carreras políticas de quienes deben monitorear la temperatura ciudadana.