GUANAJUATO, GTO.- En México hay 32.5 millones de escuincles, mejor conocidos como pequeños demonios o de plano niños y niñas.
Enclavados entre los 0 y los 14 años de edad, todos estos chiquillos y chiquillas, como bien diría el tristemente célebre ex preciso mexicano Chente Fox, festejan este martes 30 de abril el día del niño.
Sin embargo, hay por ahí algunos datos que de plano siguen aguadando la fiesta y que fueron encontrados por la banda del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, ora que en el 2010 anduvieron de metiches casa por casa.

POBRES NIÑOS
Echándole un ojo a esos estudios, incluyendo el que se aventaron los carnales del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social, al que de aquí en adelante llamaremos CONEVAL para evitar el choro, nos encontramos con que en el 2010 el 56.3% de los chavillos menores de 15 años viven en una condición de pobreza multidimensional.
Esa situación se presenta cuando de plano los chamacos no tienen garantizados al menos uno de sus sus derechos para desarrollarse como la demás banda, como por ejemplo, el estudio. También se da cuando sus jefes no tienen para darle de comer o para pagar la renta.
Para acabarla de amolar, el 75.9% de los escuincles viven en una situación de pobreza moderada y 24.1% de plano se desenvuelve en medio de la pobreza extrema, que es cuando los chavillos no tienen acceso a tres de seis servicios básicos.
Finalmente, sólo uno de cada seis chamacos no son pobres ni vulnerables.

NIÑOS CHAMBEADORES
El trabajo infantil es una pasadez de lanza absoluta. Pero existe y es constitutiva de delito además.
La Organización Internacional del Trabajo estima que en México hay 1.2 millones de niños de 5 a 14 años que chambean con sus papás o con sus conocidos.
Esta onda genera que el 14.6% de los chavillos no vaya a la escuela y que el 85.4% de éstos que trabajan, también se la rife yendo a la escuela.
De se total, el 34.3% trabaja en el campo, el 24.9% a la venta de cualquier cosa, sobre todo en los mercaditos; 14.6% son trabajadores industriales, artesanos y ayudantes.
Ahora, el 43.8% de los chamacos trabajadores son hombres y el 37.7% son mujeres.

MALTRATO INFANTIL
La Procuraduría de la Defensa del Menor ha informado que en México, durante el 2009, 21 mil 60 niñas y 19 mil 89 niños fueron maltratados.
La Organización Panamericana de la Salud comenta que la mayoría de las personas que golpean a sus hijos con la intención de corregirlos no son conscientes de que los moquetes no educan y que en realidad producen daño potencial a la salud y a la dignidad de sus chamacos.
Esta comprobado que con los golpes los chavos pierden la capacidad de relacionarse con los demás, pierden la habilidad para expresarse y sentir.
Los especialistas en estas ondas comentan que la violencia sobre los hijos es más frecuente donde la mujer sufre violencia por parte de su pareja.
De hecho, según la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares de 2011, el 38.6% de las mujeres de 15 años y más, arrejuntadas, separadas, divorciadas o viudas, le daban sus catorrazos a sus hijos cuando sufrían algún tipo de violencia por parte de sus machines.

CASO GUANAJUATO
En nuestro estado, según el censo 2010, hay 1.7 millones de chamacos entre los 0 y los 14 años de edad. Ya en bola representan el 31.1% de la banda total que vive en Guanajuato.
Ahora, de todas estas arpías traviesas, el 4.8% de entre 6 y 14 años no van a la escuela; 10 de cada 100 chavillos menores de 5 años tienen problemas con las lonjas; 13.7 niños de cada mil mueren durante el nacimiento; 38.3% de los chamacos de 12 a 23 meses tienen la prevalecia más alta a la anemia, y la principal causa de muere en los morritos de 5 a 14 años son los accidentes en carros.
Así que como ven, hay mucho trabajo por hacer a favor de nuestros niños, porque de ellos dependerá la conducción de nuestro país en unos cuantos años, y más vale que te encargues de formar hombres y mujeres de bien. Seguramente te lo agradecerás más adelante.

DERECHOS DE LOS NIÑOS Y NIÑAS

Todos los niños y niñas deben tener los mismos derechos sin distinción de sexo, color, religión o condición económica.

Los niños y niñas deben disponer de todos los medios necesarios para crecer física, mental y espiritualmente, en condiciones de libertad y dignidad.

Los niños y niñas tienen derecho a un nombre y una nacionalidad desde el momento de su nacimiento.

Los niños y niñas y sus madres tienen derecho a disfrutar de una buena alimentación, de una vivienda digna y de una atención sanitaria especial.

Los niños y niñas con enfermedades físicas y psíquicas deben recibir atención especial y la educación adecuada a sus condiciones.

Los niños y niñas han de recibir el amor y la comprensión de sus padres y crecer bajo su responsabilidad. La sociedad debe preocuparse de los niños y niñas sin familia.

Los niños y niñas tienen derecho a la educación, a la cultura y al juego.

Los niños y niñas deben ser los primeros en recibir protección en caso de peligro o accidente.

Los niños y las niñas deben estar protegidos contra cualquier forma de explotación y abandono que perjudique su salud y educación.

Los niños y niñas han de ser educados en un espíritu de comprensión, paz y amistad y han de estar protegidos contra el racismo y la intolerancia.

“Un niño siempre te pondrá de rodillas, el valor de verlo directamente a los ojos dependerá de tus actos.”
Francisco Picón.