LEON,GTO.- Nadie se iba a imaginar que de un día para otro, mariscos “EL Gallito” de la Colonia Agua Azul, se iría sin avisar, después de 6 años de ventas exitosas, en la avenida Olímpica.

El crimen que dejó  tres difuntos del día de ayer en ese negocio, ahuyentaron sin duda al propietario de ese puesto que ya se había convertido en un tradicional punto de reunión para los trabajadores del calzado y de las bodegas que se encontraban alrededor.

En ese carrito, que se ubicaba al poniente de la ciudad, había 4 empleos que beneficiaban al mismo número de familias que vivían con cierta estabilidad, todos con sueldo y propinas.

Ahí se había creado sin querer un “triángulo de la felicidad” para los fines de semana, porque en una esquina estaban los mariscos, en la otra un negocio de botanas y la tercera un depósito de cheves, que daban todas las opciones habidas y por haber para disfrutar los partidos de fut o de los amigos, en una buena mesa con “El Gallito”.

Dicen algunos, que El Gallito abandono su local después de las 2 de la mañana luego de que había recogido, mesas, sillas, tablones, enseres y el carrito con el que durante años, cargo los productos del mar con los que conquistó el paladar de muchísimos leoneses.

Hoy, solo quedó la malla ciclónica que delimitaba el lote, que a decir de algunos vecinos, ya se había agandallado “El Gallito”, que durante mucho tiempo solo vendía debajo de un pirul con su carrito y que con el pasar del tiempo, fue aplicando la vieja técnica de, “ahi les voy” , para quedarse con ese productivo pedazo de tierra.

Hoy, ahí todo es buenos recuerdos y quizá la esperanza de que El Gallito regrese a vender esos maricazasos que eran una delicia, hoy, con tristeza tendremos que decir que en la ciudad hay un negocio menos, por la inseguridad