CIUDAD DE MÉXICO.- El exgobernador de Morelos y actual diputado federal de morena, Cuauhtémoc Blanco, enfrenta una demanda por tentativa de violación en agravio de una mujer que dice ser su media hermana.
La denuncia fue interpuesta hace una semana por la presunta víctima, de acuerdo con la carpeta de investigación con folio SC01/9583/2024 de la Fiscalía General de Justicia del Estado de Morelos.
Hasta el momento, el exmandatario y ahora diputado federal por Morena no se ha pronunciado públicamente por la acusación.
Además, el dirigente estatal de Morena, Ulises Bravo, habría hecho amenazas en contra de Fabiola “N” por presentar la denuncia en contra del exfutbolista, reportaron medios de Morelos.
Las amenazas habrían consistido en emprender una demanda en su contra por “desfalco de recursos” cuando era directora de Pymes en la Secretaría de Desarrollo Económico.
Su hermano fue denunciado por violencia intrafamiliar
Cabe recordar que en mayo pasado, el hermano del exjugador del América, Ulises Bravo Molina, quien en ese momento era dirigente de Morena en Morelos, fue acusado de violencia familiar por parte de su exesposa.
El abogado de la víctima aseguró, en ese entonces, que existían pruebas de que el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) protegía a Bravo Molina porque su hermano Cuauhtémoc Blanco había intervenido usando su cargo como gobernador para favorecerlo.
Fue el 15 de mayo cuando se dio a conocer que un juez determinó no vincularlo a proceso tras una audiencia que se prolongó más de 15 horas en la ciudad judicial de Atlacholoaya.
La audiencia fue declarada como privada. Con ello, sólo las partes, sus abogados, los fiscales y el juez escucharon los elementos de prueba presentados por la fiscalía y la defensa.
Se conoció que además de la declaración de Bravo Molina, que duró al menos dos horas, se contó con la presentación de cuatro personas que actuaron como testigos, así como audios provenientes de llamadas telefónicas grabadas, entre otros elementos.
Al respecto, Liu León, madre de la hija de Ulises Bravo y quien ha denunciado que fue golpeada, amenazada, humillada y sometida durante 11 años, aseguró en entrevista que no se detendría y que sus abogados impugnarían la decisión del juez.