CIUDAD DE MÉXICO.- El Proyecto Zapotillo esta muerto y enterrado para León; esta mañana el presidente Andrés Manuel López Obrador le echó el ultimo puño de tierra.
“Tenemos que buscar la forma de ayudar a Guanajuato, para que tengan agua, pero no se puede de la presa Zapotillo, ya es imposible porque se tendrían que inundar tres pueblos y la gente no quiere eso”.
Así lo dijo el presidente durante su conferencia “mañanera” de este lunes.
Insistió en que fue una buena opción dejar fuera de la distribución de agua a la ciudad de León, para evitar inundar a los pueblos Temacapulín, Acasico y Palmarejo.
Ello permitirá, dijo, distribuir agua a los Altos de Jalisco y a la zona metropolitana de Guadalajara.
“Sí fue una salida, una opción para no dejar ahí tirada una inversión de 6 mil millones de pesos”, señaló el presidente.