LEÓN, GTO.- La verdad es que León y Pachuca pueden presumir el haber conseguido el boleto a la Fiesta Grande del futbol mexicano, pero ni locos se pueden atrever a destacar algo del partido que brindaron la noche de este sábado en tierras guanajuatenses donde ninguno de los dos equipos quiso hacerse daño.

Es cierto que los primeros minutos del partido parecían multiplicar las expectativas de un gran partido; Por el lado de los Verdes, Elías Hernández comenzó a orquestar los primeros embates a la meta de veterano Óscar Perez, quien debió ser sustituido antes de la conclusión de la primera mitad por una lesión.

Y aunque cada intento tenía lo suyo, la pelota decidía no cruzar la meta.

Tras los embates Esmeraldas, Pachuca hizo lo mismo con dos disparos de Hirving Lozano, los impactos fueron a dar a las manos de William Yarbrough.

Con 21 minutos en el cronómetro, Mauro Boselli se quedó cerca de marcar el primero en el encuentro con un remate de media vuelta desde los linderos del área. Su disparo pasó a centímetros del arco hidalguense.

El dominio del esférico era dividido, ambos equipos buscaban su chance. Pachuca también se quedó a nada de conseguir abrir el marcador con un remate de Lozano desviado por Yarbrough. La pelota rebotó en Guillermo Burdisso y terminó por estamparse contra el poste.

Inmediatamente después Rodolfo Pizarro hizo su máximo esfuerzo para empujar la pelota hasta el fondo de las redes, sin embargo no alcanzó a lograr su cometido.

El arranque del complemento tuvo intensidad, pero no la suficiente para contagiar a los dos planteles y en general a la afición, que debió conformarse con un par de jugadas de peligro por bando en los últimos 45.

Primero, la chance fue de los Esmeraldas con Burdisso y su remate al travesaño, y más tarde Jara, por los Tuzos, remató con la pierna derecha y reventó el poste.

A partir de esas dos oportunidades de gol, el encuentro se sumergió en un controvertido ritmo semi lento con algunos contactos fuertes pero sin emociones.

La afición Esmeralda no dudó ni un segundo en recriminarle la actitud a su club al término del encuentro, pese a que el sonido local no dejó de hablar ni un segundo tratando de “maquillar” los abucheos de la fiel Verdiblanca.

Pese al aburrido empate, tanto León como Pachuca llegaron a las 27 unidades, suficientes para asegurar su pase a la Fiesta Grande del futbol mexicano; Sólo resta definir las posiciones que ocuparán para encarar la lucha por el título en el balompié nacional.

Para la próxima fecha, los Tuzos recibirán a los Jaguares en el Estadio Hidalgo, mientras que los Esmeraldas viajarán a Sinaloa para enfrentarse a los Dorados.