BRASIL.- Se puso grueso en Brasil. Más de 300 mil carnales indignados por el aumento del transporte, la corrupción, los gastos de la Copa Confederaciones, y la violencia policial, salieron la noche de este lunes a las calles de São Paulo, Brasilia, Río de Janeiro, Curitiba y Belo Horizonte, para manifestarse con todo.
De hecho, según reportan las agencia de noticias, no se tenía un movimiento tan grande desde 1992.
Las manifestaciones han sido organizadas a través de las redes sociales por el “Movimiento de Estudiantes Pase Libre” desde el jueves pasado, lo que llevó al abucheo de la presidenta Dilma Rousseff el domingo pasado durante la Copa Confederaciones.
Por lo pronto se reporta que este lunes hubo un enfrentamiento en Río de Janeiro, después que un grupo de manifestantes incendió un vehículo frente a la sede de la Asamblea Legislativa del Estado y lanzó una bomba molotov, provocando momentos tensos.
Un grupo de personas derribó las grades de protección de la asamblea, hubo tiros y por lo menos seis policías fueron heridos.
En Brasilia también se registraron momentos de tensión, cuando un grupo rompió el bloque policial e invadió la rampa del Congreso. La policía recibió a los manifestantes con gas pimienta.
Se reporta que conforme la noche avanzaba más gente tomaba las calles, gritando consignas, la mayoría de ellas contra la presidenta Rousseff.